La consejera de Sanidad, Sira Repollés, ha comparecido en la Comisión de Hacienda, Presupuestos y Administración Pública para detallar las diferentes áreas del Departamento que verán incrementadas sus partidas y que en 2021 llevarán a Aragón a invertir en el sistema público sanitario 1.765 euros por habitante
El Departamento de Sanidad que dirige Sira Repollés gestionará en 2021 el mayor presupuesto de su historia, 2.328 millones de euros, un 12,35 por ciento más que en 2020, que pueden aumentar a 2.358 millones de euros con la llegada de 30 millones procedentes de fondos finalistas europeos. Una cifra total que llevará a la Comunidad a una inversión en sanidad de 1.765 euros por habitante, 349 euros más que la actual media nacional, lo que, a juicio de la consejera, demuestra el “compromiso político” del Ejecutivo autonómico con el sistema público sanitario y el ejercicio de responsabilidad y “liderazgo sobrevenido” asumido por su Departamento, el que más ha crecido, a raíz de la crisis provocada por la pandemia.
El grueso de la previsión contable se la lleva el Servicio Aragonés de Salud, 2.177 millones de euros, con un aumento de 245 millones de euros que se reparten el aumento de personal (107 millones de euros), con esas dos mil contrataciones nuevas de eventuales y personal de refuerzo cuya vinculación, según ha asegurado la consejera, acaba de ser prorrogada hasta el próximo 15 de abril. También la adquisición de materiales y suministros (92,4 millones de euros más) hasta los 567,7 millones de euros para productos farmacéuticos, reactivos y reservas estratégicas, además de 37,7 millones de euros adicionales para el pago de recetas a oficinas de farmacia que alcanzarán el montante de 363 millones de euros.
El resto, otros 9,88 millones de euros nuevos, tienen como destino alimentar la partida total de 66,7 millones para la construcción de “infraestructuras estratégicas” como el nuevo hospital de Teruel (31,12 millones de euros), las nuevas urgencias del San Jorge de Huesca (4,40 millones de euros), el centro de salud del barrio de Jesús (algo más de cuatro millones de euros), la primera anualidad del futuro hospital de Alcañiz (16,44 millones de euros), además de tres millones de euros para actuaciones en Atención Primaria y hospitalaria y otros cinco millones de euros para el plan de reposición de instalaciones.
Dentro del Departamento de Sanidad, la consejera ha reconocido la labor de Salud Pública por haber sido durante estos meses “el escudo y los ojos” del Gobierno para conocer la evolución de la pandemia, conocer los datos y tomar decisiones. Por ello, ha considerado que “sobran las razones” para el incremento de su partida en un 11,78 por ciento (4,28 millones de euros más) hasta los 40,6 millones de euros, de los que ha avanzado que reserva 900 mil euros en el capítulo II para el programa de vacunaciones, si llegara a ser necesario.
También ha explicado que el aumento en un 7,38 por ciento de la partida para la Secretaría General Técnica se debe a lo que suben los costes del seguro de responsabilidad sanitaria y del soporte de aplicaciones informáticas, mientras que la Asistencia Sanitaria, que gestionará 71 millones de euros, debe hacer frente a consecuencias de la covid como la actividad quirúrgica aplazada, las nuevas necesidades en salud mental y drogodependencia y nuevas realidades sociales que llevarán a reforzar los pisos tutelados, ampliar los recursos en hemodiálisis y facilitar la asistencia bucodental para niños con discapacidad. Sobre la cuestión de las listas de espera quirúrgicas, cuyo plan de abordaje estará listo en las próximas horas, Repollés ha asegurado que “no es suficiente” con abrir los quirófanos por las tardes y los fines de semana, por lo que ha considerado “inevitable” la colaboración “en buena sintonía” con los centros privados, que según ha establecido es tres puntos menor que la media nacional.
Además, el incremento del seis por ciento y tres millones de euros más hasta los 53,8 millones de euros en el capítulo dos del presupuesto de esta dirección general tendrá como destino la reducción de las listas de espera, los convenios con los hospitales de San Juan de Dios y la MAZ, los convenios de salud mental, las drogodependencias y el uso racional de los medicamentos. También crecen los convenios con la Federación Española de Asociaciones de Lucha Contra las Enfermedades del Riñón (ALCER) en 200 mil euros y con la Asociación Española Contra el Cáncer, en 108 mil euros.
Por último, Repollés ha destacado que la Dirección General de Derechos y Garantías dedica 1,4 millones del total de 2,7 millones a personal y que el servicio de Salud Informa se licitará en 2021 y que el Instituto Aragonés de Ciencias de la Salud ve aumentadas sus partidas en el capítulo I (860 mil euros más hasta los 6,6 millones de euros) para afrontar la ampliación de su plantilla y del capítulo II (un veinte por ciento más hasta los 3,7 millones de euros) hasta los 3,7 millones de euros con el fin de abonar el gasto en reactivos y demás fungibles del laboratorio de análisis de muestras PCR.
La socialista Olvido Moratinos ha defendido que estas cuentas apuestas por “una sanidad pública, fuerte y de calidad”. “Las comunidades en las que las palabras se han convertido en hechos, y han invertido, son las que mejor han podido gestionar la pandemia. Aragón está entre ellas y los números son incontestables”, ha reivindicado. Para ella, “se cree y se actúa para mejorar el estado del bienestar”. Por parte del PP, Ana Marín ha considerado que “el Gobierno no está a la altura del momento actual”. “La Ley más importante debería reflejar lo excepcional del momento, pensar, actuar y responder en grande, poniéndola al servicio de tres generaciones. Ustedes se han quedado pequeños y no quisieron entablar diálogo”, ha criticado la portavoz sanitaria del principal grupo de la oposición.
“Los desafíos generan oportunidades que no podemos desaprovechar”, ha arrancado su intervención Susana Gaspar. Una sentencia sobre la que esta diputada de Ciudadanos ha asegurado que “en nuestra mano está”. Según ha defendido, “el diálogo y la mano tendida estará presente en su formación” para “dar solución a los problemas sanitarios”. Desde Podemos, Itxaso Cabrera ha apostado por “una defensa de la Sanidad pública ahora y siempre”. “Es un presupuesto que crece en plena crisis sanitaria, económica y social, así como emocional. Crece porque toma otras políticas diferentes a las austericidas. Un modelo de gestión de lo público, para lo público, de lo común para que nadie quede atrás”, ha defendido.
Para Isabel Lasobras (CHA), el presupuesto “está diseñado para superar cuanto antes las consecuencias de la pandemia”. “Debe servir para reforzar la atención sanitaria desde los medios materiales y humanos, así fortalecemos un sistema público muy exigido actualmente”, ha asegurado. En su opinión, “se garantiza una atención suficiente y equitativa”. Santiago Morón, encargado de posicionar a Vox, ha considerado que la de este Departamento “es un cifra respetable” pero ha mostrado dudas sobre “si va a ser suficiente en la situación actual”. Además, también ha considerado que “no queda clara la dotación para los conciertos de asistencia sanitaria ni para un plan de reducción de listas de espera”. “Se tiene que materializar con partidas suficientes”, ha reclamado.
La portavoz sectorial del PAR, Esther Peirat, ha puesto en valor el acuerdo del cuatripartito en un “año atípico, excepcional y muy duro”. “La salud cobra toda la importancia. Su consejería es vital en el 2021 y tiene todas las partidas incrementadas, nos hacemos a la idea de la importancia que le da el Ejecutivo”, ha reivindicado. En su opinión, “las cifras hablan por sí solas”. Desde IU, Álvaro Sanz ha considerado que Sanidad “es una de las consejerías más vitales y de las que más cambios estructurales tendría que haber acometido”. “No estamos satisfechos con el texto del presupuesto más allá de las cifras. Es imposible discernir cuánto dinero va a Primaria y cuanto a Especializada. Tampoco cómo se han visto reforzadas las redes básicas”, ha criticado.