La Comisión de Agricultura, Ganadería y Medio Ambiente también ha debatido y rechazado una propuesta de Ciudadanos para impulsar las biorrefinerías en las zonas despobladas mediante la captación de fondos europeos
La Comisión de Agricultura, Ganadería Medio Ambiente ha aprobado con la única abstención de IU una iniciativa del diputado del PP Ramón Celma para impulsar al Gobierno de Aragón para que resuelva el problema que el cierre de la central térmica de Andorra ocasiona a los agricultores de la comarca Andorra Sierra de Arcos por el encarecimiento en el precio del agua.
Para ello, el popular no ha dudado en reiterar una iniciativa ya aprobada el pasado mes de junio que reclama del Ejecutivo autonómico, con la implicación del Gobierno central, acciones políticas y económicas para garantizar la disponibilidad de agua, la reducción de los costes de explotación, la optimización del recurso hídrico y el incremento de la capacidad de embalse. Celma ha expresado “la desesperación” de unos regantes, “muchos de ellos jóvenes”, dedicados a una agroalimentación “que funciona” y que ven cómo el encarecimiento del precio del agua por la marcha de la central hará inviable sus negocios.
La socialista Silvia Gimeno ha asegurado que la anterior proposición aprobada fue remitida a la Delegación del Gobierno en julio y ha asegurado que su apoyo a los regantes y agricultores es “firme, contundente e incuestionable”.
Ramiro Domínguez (Ciudadanos) ha estimado conveniente insistir en esta cuestión “por no saber absolutamente nada” desde su traslado a la Delegación del Gobierno y ha defendido que en la zona hay “buena tierra y buen clima”, por lo que ha llamado a “concienciar” sobre el aprovechamiento del agua.
Nacho Escartín (Podemos EQUO Aragón) ha apuntado los problemas del agua de boca demasiado calcificada y que haya menos personas “para pagar todo el pastel”, pero ha reprochado que el PP nunca propuso aprovechar el excedente de la concesión de la central.
Joaquín Palacín (CHA) se ha mostrado partidario de volver a dar su apoyo a la proposición porque si no el sector agrícola que experimentará “un aumento inasumible” del coste del agua que pondrá “en riesgo” la viabilidad de las explotaciones
Santiago Morón (Vox en Aragón) ha estimado que “por razones políticas”, el cierre de la central térmica está teniendo consecuencias económicas desastrosas, “sin transición justa, sólo con proyectos y no realidades”.
Esther Peirat (PAR), ha defendido que “por coherencia” con lo votado el pasado mes de junio su grupo está por garantizar la disponibilidad del agua, reducir los costes y aumentar la capacidad del embalse.
Por último, Álvaro Sanz (IU) ha considerado que tiene más sentido mantener las dotaciones que hablar de un nuevo proyecto de elevación de las aguas “porque lo que hace falta son usuarios” y le ha pedido in voce, pero sin éxito, suprimir la petición para que se incremente la capacidad del embalse, por lo que su voto se ha quedado en la abstención.
DECAE LA INICIATIVA SOBRE LAS REFINERÍAS
El órgano sectorial también ha debatido una propuesta presentada por la diputada de Ciudadanos Beatriz Acín para que el Gobierno de Aragón elabore un plan de impulso de las biorrefinerías en zonas despobladas de la región mediante la captación de fondos europeos. Para ello ha ofrecido varios argumentos como “la viabilidad demostrada” de la transformación de residuos urbanos o la falta de depuración de las aguas de muchos pueblos del Pirineo. Pese a ello, la mayoría de los grupos han tildado la iniciativa de “inconcreta” por tratar muchos asuntos y no han mostrado su apoyo para que saliera adelante.
Silvia Gimeno (PSOE) ha justificado su no por la mezcla de asuntos tratados y la competencia de varios departamentos. Ignacio Romero (PP) sí ha respaldado la propuesta, pero ha apuntado que ni los barbechos de secano ni los de regadío pueden dedicarse a lo propuesto por Acín sin perder las ayudas de la PAC. Para Nacho Escartín (Podemos EQUO Aragón), el texto “toca mucho palos, pero mal enfocados” hacia un sector que puede ser estratégico, “pero que genera muchas controversias”, ha advertido.
Joaquín Palacín (CHA) ha coincidido el fondo de la lucha contra el cambio climático pero ha descartado su apoyo por la mezcla de asuntos tratados. Santiago Morón (Vox en Aragón) ha circunscrito la responsabilidad de la Administración a “atraer inversión y reducir trabas” para que la iniciativa privada sea “agente de innovación”, lo que ha trasladado mediante una enmienda in voce finalmente aceptada que le ha decidido a dar su respaldo.
Por su parte, Esther Peirat (PAR) ha reclamado la necesidad de estudiar “la viabilidad y la madurez” de las tecnologías aplicadas para fomentar un sector y Álvaro Sanz (IU) ha propuesto un debate más extenso porque las alternativas para los residuos deben ser “socialmente respetuosas, con un valor ambiental y contando con aquiescencia del territorio”.